Y mientras las llamas consumían todo a su paso en uno de los departamentos del último piso de un edificio ubicado en la esquina de Alberdi y San Lorenzo, el llamado a los bomberos comenzó a ser una prioridad para todos los que pasaban por el lugar.
Vecinos rompiendo mamparas demarcatorias de los apartamentos para correrse de las llamas. Toda tensión, arriba y en tierra firme, donde gente pedía a quienes veían desde abajo “no tirarse”.
La Policía había llegado en tiempo y forma, pero los bomberos, no. Era esperar y sufrir desde lejos no sabiendo qué pasó y por qué el departamento de la esquina de la propiedad se consumía en el fuego, un fuego tóxico que empezó a tapar las salidas de emergencias con su humo negro.
Pasaron varios minutos hasta que llegaron los bomberos y empezaron a controlar la situación.
Respecto a los daños materiales, aún no hay datos precisos. Lo que sí, una primera versión habla de un posible cortocircuito en una "zapatilla" del departamento y ello habría producido el incendio.